Ustedes, ¡NO!
Ustedes:
sudacas,
yankis,
gringos
rojos,
judíos,
turkos
chinos,
koreanos,
ponjas
católicos, protestantes, musulmanes
negros,
amarillos,
blanquitos
bolitas,
paraguas,
perucas,
shilenos,
gallegos
cabecitas,
villeros,
piqueteros
peronachos, radichetas, comunistas
sidosos,
obesos,
adictos
enano, bizcocho, mogólico
marica, putazo, tragasable
renguito,
pelado,
cieguito
gorda, chismosa, trola
histérica, perra, prosti, trava
loco, tarado, esquizofrénico
niños bien,
chetos caretas,
pibes chorros
Ustedes, ¡NO!
¿Yo? Yo, tampoco.
Me llamo Rafael Sturla
tengo 47 años,
no tengo familia,
no tengo mujer ni hijos,
no tengo novia, amigovia, ni amante,
me gustan las mujeres y nunca pagué por sexo
Soy heterosexual
y apoyo iguales derechos civiles para todos.
No tengo casa propia,
no tengo ningún título profesional,
no tengo auto, ni moto, ni cuenta bancaria
Sólo tengo más de tres mil libros en mi biblioteca,
cientos de poemas de mi autoría,
una docena de relatos propios,
dos novelas terminadas, corregidas, e inéditas,
una variada, rica, y criteriosa, hemeroteca,
varias docenas de cd de la mejor música, compañera.
A mí, ¿cómo me llamarán?
Cómo:
¿Bicho raro,
pajerito,
guacho,
perdedor,
inadaptado,
mediocre,
inútil,
don Nadie?
¡Nuestras palabras matan/
crean desigualdad/
hacen más feo el mundo!
¿Hasta cuándo seremos homicidas apelativos?
¿Hasta cuándo?
Las palabras que no no matan, no nos hacen más fuertes:
pueden dejarnos más débiles y encerrarnos aún más.
La pregunta sigue siendo la misma: ¿HASTA CUÁNDO?
No hay comentarios:
Publicar un comentario