lunes, 19 de enero de 2009

El legado del cuervo w. g. bush: invasiones, destrucciones, fundamentalismos asesinos, inédita crisis financiera, violaciones a los derechos humanos.

Este hombre, que supo ser el más poderoso
entre los poderosos de la Tierra
también fue el más simplista y reduccionista.

También se erigió en sheriff y soldado fundamentalista.

Este hombre quizá no ganó en las elecciones
ante su opositor demócrata, Al Gore, nueve años atrás,
y entró por la puerta de servicio a la Casa Blanca.

Se creyó un elegido por el Señor para encarnar el Bien.

Tras el ataque a las Torres Gemelas invadió Afghanistán,
intentando atrapar a Osama Ben Laden que, amigo de Usa, antes,
enemigo terrorista, ahora: fue tras los terroristas Taliban y su fuerza
se convirtió en terrosita invasor, ¿cuántos muertos nativos lograron?
y ¿cuántos más tendrán, ya que siguen allí y es visible su derrota?

Luego invadió Iraq, matando cientos de miles de civiles
y destruyendo milenarios edificios, con el argumento
de que poseían armas atómicas, las que nunca se hallaron:
quiso imponer la Democracia y puso a un gobierno títere
y la cifra de sus muertos rondaría los 800 mil

allí mismo sus soldados impusieron las torturas
más atroces y vejatorias: las que él aprobó.
Abu Grahib es el nombre de ese infierno.

Para completar este cuadro homicida y aberrante fortaleció Guantánamo
y entonces sistematizó la deshumanización de sus detenidos e ideó
centros "clandestinos" de detención de paso en distintas capitales
de la Europa funcional a sus deseos.

Pero también supo violar los derechos humanos en su propio país
y redujo los límites de libertad de sus ciudadanos.

Este hombre desnudó el racismo del blanco y desatendió
a los habitantes, negros y pobres, en la devastada New Orleans
tras el paso de Katrina.

Este hombre no firmó el Pacto de Kioto y contribuyó grandemente
a la continuación del calentamiento global que cambia el
orden de la Naturaleza y ésta se cobra con cada nuevo
fenomeno climático que, en pocos minutos, se lleva
cientos de miles de víctimas.

Este presidente , de bajo coeficiente intelectual
y torpe para hablar, desoyó todas las Resoluciones de la ONU
en su contra y, además, consintió a Israel en todos
sus caprichos ocupacionistas y homicidas.

Este hombre, "concentrado" en sus guerras externas, se distrajo
de las señales inequívocas que le enviaba la burbuja del
negocio inmobiliario en sus propias narices, no tomó medidas
a tiempo y dio lugar a la gran Crisis bancario-financiera
que está creando cientos de nuevos home less, además de
mayor pobreza y desempleo en muchos países.

A este hombre que deja la Casa Banca le deseo los infiernos que el Dante imaginó.




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